Enfermedades autoinmunes: cuando el cuerpo se ataca a sí mismo
Por: LMW / Tiempo de lectura: 10 min
La autoinmunidad ocurre cuando el sistema inmunitario, la defensa de nuestro cuerpo contra los invasores, se confunde. El propio tejido queda atrapado y a veces, todo el cuerpo se convierte en víctima.
El rol del sistema inmunitario dentro de nuestro cuerpo es protegernos contra las enfermedades e infecciones. El problema es que cuando se trata de una enfermedad autoinmune, el sistema inmunitario daña las células sanas de nuestro cuerpo por error. A pesar de que muchas veces estas enfermedades suelen ser hereditarias, aún no se conocen sus causas con exactitud.
Yvelise Barrios, médico integrante de la Sociedad Española de Inmunología, asegura que este tipo de enfermedades son muy frecuentes en España. Explica cómo cada vez son más los nuevos padecimientos que son considerados como tal, pese a que antes no estaban etiquetados como autoinmunes.
Las células y tejidos específicos contra los que el cuerpo produce anticuerpos por error determinan qué enfermedad autoinmune estamos contrayendo. Por ejemplo, si nuestro cuerpo ataca al páncreas, estará produciendo menos insulina y cabe la posibilidad de que el paciente desarrolle diabetes tipo 1.
Existen más de 80 tipos de enfermedades autoinmunes, muchas con síntomas similares que a veces hace difícil saber con exactitud qué trastorno padece el paciente. En la mayoría de los casos quien acude al consultorio suele quedarse de tener dolores musculares, fatiga o fiebre más bien baja. Otro síntoma común entre este tipo de enfermedades son las inflamaciones que causan enrojecimiento, acaloramiento, hinchazón o dolor.
Estas enfermedades pueden o bien agudizarse con los años o empeorar. Lo curioso es que hay veces que incluso pueden tener remisiones, cuando los síntomas mejoran o desaparecen. Por ejemplo, se dice que las mujeres después de la menopausia tienden a mejorar sus síntomas de la enfermedad.
Estas son 7 de las enfermedades autoinmunes más comunes:
1. Diabetes tipo 1: Esta enfermedad está relacionada con la destrucción de las células sanas del páncreas. El páncreas necesita de la insulina para llevar el azúcar en sangre a las células. Al dejar de producir suficiente insulina, los niveles de azúcar en sangre tienden a elevarse más de lo normal. Es por esto por lo que los diabéticos necesitan insulina a diario para mantener bajo control los niveles de azúcar en sangre.
2. Artritis reumatoide: Esta enfermedad está causada por el ataque del sistema inmunológico al tejido articular sano. Esto llevará al paciente a sentir dolor, hinchazón, rigidez y pérdida de función en algunas áreas como muñecas o rodillas. Los síntomas aumentan después de algún desencadenante como el estrés o demasiada actividad.
3. Lupus eritematoso sistémico: Esta enfermedad se desarrolla cuando el sistema inmunológico ataca la piel, las articulaciones y algunos órganos como el corazón, los pulmones o el cerebro. Algunos síntomas que sufren las personas que padecen lupus son la fatiga, la hinchazón de articulaciones, úlceras en la boca o erupciones cutáneas, entre otras.
4. Enfermedad de Crohn: Esta se suele desarrollar entre los 20 y 29 años normalmente. Y es cuando el sistema inmunológico ataca el intestino y causa inflamación en la pared del tracto gastrointestinal (sobretodo en el intestino delgado). Algunos síntomas serían la diarrea, los calambres, la pérdida de peso o de apetito.
5. Enfermedad de Graves: En esta ocasión el sistema inmunológico ataca la tiroides, haciendo que bombee demasiada hormona tiroidea. Esto causa hipertiroidismo y otros síntomas como las palpitaciones cardíacas, nerviosismo o sensación de calor extrema. Hasta el 50% de personas que padecen esta enfermedad desarrollan una inflamación en el músculo de los ojos.
6. Tiroiditis de Hashimoto: Esta enfermedad es lo opuesto a la de Grave, ya que el sistema inmunológico repercute la glándula de la tiroides haciendo que se bombee muy poca hormona. Esto causaría un hipotiroidismo leve con síntomas como el aumento de peso, la pérdida de cabello, sensación de hormigueo en las manos o sensación de frío constante.
7. Enfermedad Celíaca: Se desarrolla cuando el sistema inmunológico se vuelve muy sensible al gluten. El sistema inmunológico crea una inflamación que daña las vellosidades intestinales (del intestino delgado). Esto puede causar la mala absorción de nutrientes, pérdida de peso, dolor abdominal e incluso problemas neurológicos como migraña.
Barrios asegura que es complicado evitar estas enfermedades, ya que para cada una hay múltiples influencias: desde tu background genético, factores ambientales entre otras cosas. “Las recomendaciones que hacemos desde la Sociedad Española de Inmunología es a mantener unos hábitos de vida saludable para que nuestro sistema inmune pueda estar en las mejores condiciones posibles”.
También es beneficioso vacunarse frente a todas las enfermedades infecciosas, de acuerdo a la especialista. Lo llama “inmunidad entrenada” o llevar tu sistema inmune al gimnasio. Ahora, que el organismo ha dejado de estar en contacto con muchísimas enfermedades infecciosas porque han ido desapareciendo, la protección se logra de forma artificial a través de la vacunación para que el sistema inmune sea capaz de protegerse.
Y aunque en muchos casos no hay cura, sí existen tratamientos que tratan de aliviar los síntomas, regulando la respuesta inmunitaria hiperactiva del cuerpo con medicamentos (que pueden tener efectos secundarios). Es por esto que consultar con un médico de medicina alternativa, holística o funcional puede ayudar a mejorar los síntomas sin efectos secundarios (a través de la nutrición y de cambios en el estilo de vida).
Para ayudar a prevenir la aparición de estas enfermedades hay algunos alimentos que pueden ser beneficiosos, ya que combaten la inflamación y restauran el equilibrio en la flora intestinal. Entre estos alimentos destacan las algas verdes y azules (espirulina o chlorella aumentan los lactobacillus y bifidobacterias del tracto digestivo), el chucrut (mejora la flora intestinal, el pH del intestino delgado y el proceso digestivo) o la cúrcuma (antiinflamatorio natural muy potente).